Sobre trabajo publicado en Comunicaciones Botánicas del Museo de Historia Natural de Montevideo, 1999.
“Los bosques y los matorrales psamófilos en el litoral platense y atlántico del uruguay” (*)
Una investigación realizada por dos investigadores de la Cátedra de Botánica de la Facultad de Química acaba de confirmar fehacientemente la existencia de un tipo de bosque y matorral espinoso en el litoral platense y atlántico del Uruguay.
Los autores (Eduardo Alonso Paz y María Julia Bassagoda) realizaron un exhaustivo relevamiento de la zona costera entre el arroyo Pando y la frontera con Brasil e identificaron numerosos remanentes de estos tipos de formaciones vegetales a lo largo de toda la costa, a los que describieron al detalle en cuanto a ubicación, identificación de especies y su estratificación.
“Los bosques y matorrales espinosos psamófilos son comunidades vegetales características de los campos de dunas del litoral platense y atlántico del Uruguay. Están integrados por especies de amplia distribución en serranías o bosques de galería del sur del país pero, por su particular asociación y localización, constituyen formaciones únicas en la región”. A continuación, los autores sostienen que “actualmente estos bosques y matorrales están amenazados de extinción ya que ocupan las zonas costeras del Uruguay con mayor desarrollo turístico”.
En lo referente al bosque psamófilo, se lo caracteriza como estando “conformado por varios estratos: arbóreo, arbustivo y herbáceo, con enredaderas y epífitas. Este bosque tiene una altura de 3,5m a 6m (máximo 8 m) y corresponde a una etapa estable en la colonización y fijación de las dunas”.
En cuanto al matorral espinoso psamófilo, “es achaparrado y está constituido por arbustos y árboles de porte arbustivo, la mayoría espinosos, de no más de 3 m de altura (más frecuente 1 a 2 m), tunas, enredaderas y helechos”. A diferencia del bosque, este matorral “es una etapa leñosa pionera en la colonización de las dunas”.
Estas dos formaciones vegetales están interrelacionadas. El matorral “es pionero en la sucesión vegetal que lleva a la fijación natural y a la formación del suelo en los campos de dunas próximos a la playa. El bosque psamófilo es una etapa posterior, estable, que se desarrolla en lugares relativamente protegidos de los vientos dominantes y del rocío salino”.
“Estas formaciones vegetales tenían una distribución mucho más amplia y eran el componente leñoso habitual de la cadena de médanos litorales antes de la intervención del hombre y de la implantación de las especies exóticas fijadoras. Actualmente los restos que quedan son vestigios de dicha distribución y están amenazados de extinción”.
Acceder aquí al trabajo en formato pdf.
(*) Trabajo publicado en Comunicaciones Botánicas del Museo de Historia Natural de Montevideo 6 (113) 12p. 1999