En el informativo central de Teledoce del día de ayer (9 de abril), retrasmitido en el informativo de la mañana de hoy, se incluyó una entrevista al integrante del Grupo Guayubira Ricardo Carrere. A continuación la periodista consultó a la directora de la DINAMA Alicia Torres para que diera su versión de los hechos denunciados por Carrere con respecto a la instalación de fábricas de productos químicos peligrosos en la zona franca otorgada a la empresa finlandesa Botnia en Fray Bentos. Lamentamos tener que informar a la población que la Sra. Torres faltó tres veces a la verdad en el corto transcurso de esa entrevista, a saber:
1) Afirmó que las fábricas de productos químicos que se van a instalar en la zona franca ya fueron incluidas en la evaluación del proyecto presentado por Botnia.
2) Afirmó que el Grupo Guayubira ya había hecho en su momento las críticas pertinentes y que se le había dado respuesta.
3) Afirmó que en la Comisión de Seguimiento de Botnia recientemente creada participan grupos ecologistas.
Con respecto al primer punto, la Sra Torres demuestra tener poca memoria. En efecto, en una entrevista de julio de 2005, publicada por el semanario Brecha, preguntada sobre la instalación de una planta química, la directora de la DINAMA fue muy clara al respecto, al decir que:
“La planta que se analizó es la que produce celulosa. Ese proceso utiliza determinados insumos, y estos insumos conviene que sean producidos en el entorno de esas plantas. Tanto Botnia como la española ENCE, cuyos proyectos están situados en un terreno mayor, han planteado que, posiblemente asociadas, instalen otras industrias, dentro del terreno o fuera. Dentro del predio hay que estudiarlo como emprendimiento nuevo y, a la vez, ellos son responsables de todo lo que funciona en ese predio. Ahora también nos han llegado otros proyectos, con propuestas de instalarse en otros lugares y abastecer. En todos esos casos habrá que hacer un estudio específico.” Eso es lo que ahora espera Guayubira y eso es lo que ahora la directora sostiene que ya se hizo.
Con respecto al segundo punto, Guayubira nunca recibió ninguna respuesta a los múltiples cuestionamientos que hizo tanto en las distintas instancias de participación pública previstas en el Reglamento de Evaluación de Impacto Ambiental (léase audiencia pública y período de manifiesto), así como en consultas que le fueron realizadas por correo electrónico.
Finalmente, con respecto a la integración de grupos “ecologistas” a la Comisión de Seguimiento de Botnia, la Sra Torres invitó telefónicamente y a último momento al Grupo Ecológico de Young a participar en la reunión de la Comisión que así lo hizo, en el entendido que se trataba de una reunión informativa. En ningún momento fueron invitados o aceptaron integrar dicha Comisión. Consultados directamente al respecto, afirman tajantemente que no integran dicha Comisión y que incluso rehusaron ser entrevistados por la prensa para evitar malos entendidos. El otro grupo “ecologista” que se ha mencionado ha sido el Instituto de Estudios de Río Negro José Artigas, de nula trayectoria dentro del movimiento ecologista nacional. Es decir, que las afirmaciones de la Sra Torres de que en la Comisión participan “grupos ecologistas” tampoco son ciertas.
Esta situación es muy grave, puesto que quien ha faltado a la verdad es la directora del organismo encargado de aprobar y controlar a la empresa Botnia. Su función no consiste en desmentir con falsedades a grupos ambientalistas, sino en proteger al país y a su gente de los posibles impactos ambientales de empresas como Botnia. Para ello requiere de una credibilidad que está a todas luces perdiendo con declaraciones como éstas.
