En Uruguay, mientras el precio de los alimentos sube y la alimentación del pueblo se empobrece, se destina cada vez más tierra a monocultivos forestales y agrícolas a gran escala.
Sabía usted que:
– más de un millón de hectáreas están ocupadas con plantaciones forestales. Y los árboles NO SE COMEN.
– más de un millón de hectáreas están plantadas con soja transgénica. Y la producción está destinada a la exportación a Europa y China.
– la importación de agrotóxicos se ha duplicado. Y esto significa que miles y miles de toneladas de venenos son esparcidas en nuestros campos y fuentes de agua.
En Uruguay, mientras se habla de soberanía territorial, hay cada vez más cultivos transgénicos, más forestación y ahora proyectos de minería que:
– significan la entrega de nuestra soberanía alimentaria a las grandes transnacionales
– destruyen nuestra biodiversidad
– contaminan nuestros suelos y nuestra agua
– afectan nuestra salud
La soberanía alimentaria es el derecho de los pueblos a alimentos nutritivos y culturalmente adecuados, accesibles, producidos de forma sustentable y ecológica, y su derecho a decidir su propio sistema alimentario y productivo y no que lo decidan las multinacionales.
¡Sí a la producción sustentable y ecológica de alimentos!
¡No a la especulación y usurpación de nuestros bienes naturales!
Grupo Guayubira y Rapal-Uruguay
octubre de 2011