Recientemente hemos recibido unos aportes muy interesantes al artículo difundido en enero 2007 por Guayubira sobre la falsa mandioca (ver http://www.guayubira.org.uy/monte/Manihot.pdf). Los mismos provienen de un apicultor (Mario Villalba) y contribuyen a ampliar el conocimiento sobre este árbol, por lo que a continuación compartimos sus observaciones.
Villalba empieza contando que “en Santa Lucía los cafetos o falsa mandioca desde años son usados en veredas y patios por su sombra y bonita forma de paraguas”. Esta experiencia de Santa Lucía muestra que se trata de una especie apta para ser incluida en el arbolado público de las ciudades, lo que hasta ahora ha sido muy marginal.
Luego Villalba agrega una serie de datos inéditos acerca de las cualidades de la falsa mandioca para la producción de miel, que considera ser “una de las plantas más melíferas que conozco”. Dice que “poseen una particularidad interesante: cuando están en floración, al amanecer pero antes que asome el sol se siente el zumbido de cientos de abejas que lo sobrevuelan esperando que pocos minutos después las flores abran sus pétalos para poder libar. Alrededor de mediodía se vuelven a cerrar los pétalos, no quedando ninguna abeja en los alrededores… la historia se repite al amanecer del próximo día”.
Lo anterior genera cierto temor a los vecinos, ya que temen ser picados por las abejas. Al respecto Villalba cuenta de “la cantidad de llamadas que llegan a casa en noviembre-diciembre de gente asustada porque le está llegando un enjambre a su árbol de la vereda…. y la contestación de cualquiera que esté en casa : observe el árbol a mediodía y si no vuelan más abejas hasta el día siguiente ,no se preocupen, ya que son abejas libando néctar y cuando lo hacen jamás atacan a nadie. De cualquier manera algunos terminan cortando el árbol”.
Otra observación interesante se refiere a que “todos los extremos finos en que termina cada gajo siempre se secan a principio de junio aunque no vengan heladas o el árbol esté a resguardo aún bajo alero; es como si la planta se podara a si misma. Para los que tienen churrasquera o estufa, atesoren estas ramitas secas, es lo mejor que he usado para encender el fuego; como son huecas se encienden como si tuvieran pólvora”. Y termina con el siguiente pensamiento: “La naturaleza nos provee todo, hay que aprender a encontrarlo”.
doy fe, en verano me levantaba alas 5 de la mañana con las primeras luces y me despertaba el zumbido en las flores de la falsa mandioca ,que por aca es tipica de los valdios.
Coincido totalmente con la descripción. Es un arból disfrutable y por demás entretenido, porque a todo lo detallado se le suma la graciosa forma de diseminar sus semillas , explosiva, pegando en techos y paredes cual chumbos!!! Opino igual, que servirìan al ornato público porque su gran frondosidad , muy requerida en verano, se limpia casi de una vez en otoño facilitando así el barrido de las calles, y por su veloz crecimiento, en caso de tenerlos que cortar por raíces u otro motivo, se sustituyen rápidamente. El zumbido de las mañanas en verano es revitalizante!!!! Un gusto compartir este disfrute.Leí que sus semillas son comestibles… tienen información científica al respecto??? Gracias por vuestro aporte.